VOI - Voice of Indonesia | Informing, Connecting, Dignifying

VOINEWS.ID - La pandemia de COVID-19 ha desarraigado las economías de muchos países importantes del mundo, desde Singapur, EE.UU., Francia, Italia, España, Inglaterra, Polonia, Alemania, Corea del Sur, Hong Kong, Malasia, Singapur, Filipinas, Tailandia y Japón.

La directora gerente del FMI, Kristalina Georgieva, dijo en una entrevista especial con channelnewsasia que los peores shocks económicos habían pasado.

Aun así, dijo, los países del mundo aún no están saliendo de su peor condición y, según él, no hay señales para el camino de la recuperación económica.

Según ella, solo China tiene la señal hacia la recuperación económica en medio de la actual pandemia de COVID-19.

China, que se convirtió en el primer epicentro de la propagación del Covid-19, había registrado un crecimiento económico negativo en el primer trimestre de 2020, un 6,8 por ciento. Sin embargo, China tuvo suerte porque su economía se recuperó en el segundo trimestre y registró un crecimiento en el rango del 3,2 por ciento.

“Los datos provenientes de los últimos meses no son tan sombríos como pensábamos hace unos meses. Entonces, los peores choques que hicieron que nuestra economía se detuviera han quedado atrás.

Pero aún no ha salido de las peores condiciones. Los brotes verdes de recuperación son tentativamente desiguales e inciertos. De hecho, China es una de las economías con camino hacia la recuperación”, dijo Kristalina Georgieva.

Aunque otros países de Asia aún no han mostrado signos de recuperación, Kristalina Georgieva elogió los pasos de los países asiáticos para reducir la propagación del coronavirus, así como los pasos para impulsar el crecimiento económico mediante inyecciones de estímulo.

“Y es importante darse cuenta de que Asia ha sido realmente buena en la implementación de medidas de supresión (tasa de propagación del virus), que incluyen un estímulo muy fuerte utilizando políticas de seguimiento acomodaticias hasta que la economía vuelva a crecer’.

El FMI brindó apoyo a los países afectados por la pandemia Covid-19, entre otros, aumentando la capacidad crediticia para los miembros a 1 billón de dólares estadounidenses.(can/Borgi)