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VOINEWS.ID - Estados Unidos renovó el miércoles (10 de febrero) su llamado a Turquía para que se deshaga de un avanzado sistema de defensa aérea ruso, y pareció rechazar una oferta de Ankara para evitar las sanciones estadounidenses.

El ministro de Defensa turco, Hulusi Akar, en una entrevista esta semana propuso un compromiso en el que el aliado de la OTAN no despliega por completo los S-400, que Rusia construyó originalmente para atacar aviones occidentales.

El portavoz del Departamento de Estado, Ned Price, dijo cuando se le preguntó sobre la propuesta turca: "Nuestra política con respecto a los S-400 no ha cambiado".

Dijo a los periodistas: "Los S-400 rusos son incompatibles con los equipos de la OTAN, amenazan la seguridad de la tecnología de la OTAN y son incompatibles con los compromisos de Turquía como aliado de la OTAN".

Akar trazó un paralelo con el histórico rival Grecia, que compró el antiguo sistema S-300 de Rusia después de las amenazas turcas de atacar Chipre, pero no lo hizo completamente operativo.

Los funcionarios estadounidenses minimizaron el paralelismo, diciendo que el S-400 era un sistema más avanzado.

Turquía siguió adelante con la compra a pesar de las advertencias de Estados Unidos, que bajo el expresidente Donald Trump expulsó a Ankara del programa de aviones de combate F-35 e impuso sanciones a la agencia de adquisiciones militares de Turquía.

El presidente Joe Biden antes de las elecciones prometió endurecer la postura de Estados Unidos sobre el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, a quien ha descrito como un autócrata.

La administración de Biden ya ha expresado su preocupación por las detenciones y los comentarios homofóbicos mientras las autoridades turcas toman medidas enérgicas contra los manifestantes estudiantiles. (cna/brg)